Mujer de 24 años sin antecedentes médicos de interés que consultó por lesiones asintomáticas en las axilas de 4 meses de evolución. Refería que las lesiones habían comenzado después de 3 sesiones de fotodepilación con luz pulsada intensa (IPL) en las axilas.
Exploración físicaA la exploración presentaba abundantes pápulas milimétricas color piel-amarillentas foliculares agrupadas de forma simétrica en ambas axilas (fig. 1).
HistopatologíaLa biopsia cutánea demostró glándulas apocrinas con conductos dilatados rodeadas de un infiltrado inflamatorio similar al existente alrededor del infundíbulo folicular (fig. 2). Este infiltrado inflamatorio se componía principalmente de células de citoplasma amplio, claro, con microgránulos de lípidos, que correspondía a histiocitos xantomizados, lo que se denomina xantomatosis perifolicular (fig. 3). También se objetivó espongiosis en el conducto excretor de la glándula apocrina y un tapón queratósico en el infundíbulo folicular.
¿Cuál es su diagnóstico?
DiagnósticoEnfermedad de Fox-Fordyce axilar después de tratamiento de depilación con IPL.
Evolución y tratamientoLa paciente realizó tratamiento con tretinoína al 0,05% crema por las noches, con cierta mejoría del cuadro, pero sin llegar a la resolución completa del mismo.
ComentarioLa enfermedad de Fox-Fordyce (EFF) o miliaria apocrina es una entidad poco frecuente que fue descrita por Fox y Fordyce en 1902 y se caracteriza por una alteración crónica de las glándulas sudoríparas apocrinas. Clínicamente se manifiesta por la aparición simétrica de pápulas milimétricas color piel o amarillentas localizadas en las áreas de distribución de las glándulas sudoríparas apocrinas, como las axilas, las areolas mamarias, el área anogenital y umbilical1. Afecta principalmente a mujeres pospuberales y los síntomas tienden a resolverse con la menopausia, el uso de anticonceptivos orales o el embarazo. Su patogenia consiste en una alteración de la queratinización infundibular, con la consecuente obstrucción ductal apocrina y dilatación glandular apocrina. Se piensa que esto está condicionado por factores hormonales y por factores mecánicos.
Recientemente se han publicado 2 casos de enfermedad de Fox-Fordyce axilar inducidos por láser de depilación2–4. Los sistemas de depilación, tanto láser como IPL, se basan en el fenómeno de fotodermólisis selectiva, que consiste en que la melanina del folículo piloso absorbe la luz emitida por estos sistemas y la transforma en calor, con el consecuente daño en el tejido folicular, y como resultado la pérdida del pelo. La estrecha relación temporal entre estos mecanismos de depilación y la aparición de la EFF sugiere la posibilidad de que estos procedimientos induzcan un daño en el infundíbulo folicular, alterando la maduración de los queratinocitos infundibulares e iniciando la cascada patogénica de la EFF.
Los hallazgos histopatológicos que describen la EFF son muy variados; existen unos tradicionales como la dilatación-hiperqueratosis del infundíbulo folicular, la espongiosis del epitelio infundibular y el infiltrado linfocitario e histiocitario perianexial; y otros descritos más recientes entre los que destaca la xantomatosis perifolicular. Últimamente se ha definido la xantomatosis perifolicular como un claro marcador consistente y específico de la enfermedad de Fox-Fordyce5,6, sobre todo axilar. La explicación patogénica para esta xantomatosis perifolicular se basa en que la obstrucción folicular determinaría la retención y posterior extravasación de material apocrino rico en lípidos, que sería fagocitado por los macrófagos, adoptando esta apariencia xantomatosa. La presencia de estos macrófagos espumosos en la dermis perifolicular contribuye a la elevación de las lesiones y les otorga esa coloración amarillenta tan característica.
El tratamiento de la EFF en general es poco satisfactorio; se ha propuesto tratamiento con corticoides tópicos e intralesionales, retinoides tópicos y sistémicos, antibióticos tópicos como la clindamicina, anticonceptivos orales, pimecrolimus tópico y una técnica modificada de liposucción para los casos más recalcitrantes.
Conflicto de interesesLos autores declaran que no tienen ningún conflicto de intereses