INTRODUCCION
El sexo oral ha sido implicado como una forma de transmisión de diversos patógenos orales, respiratorios y genitales, así como también de infecciones de transmisión sexual de origen viral, incluyendo VIH entre otros1,2.
La candidiasis no es habitualmente una enfermedad de transmisión sexual pese a que en algunos artículos se ha sugerido que el cunilinguo puede predisponer a infección vulvovaginal recurrente1. Ésta podría relacionarse con la cantidad de saliva colonizada con Candida que entra en contacto con los genitales o con el efecto antimicrobiano de la saliva que disminuiría la flora residente y permitiría el sobrecrecimiento de la Candida. Ignoramos la existencia de la situación inversa, es decir, que el varón que practica el cunilinguo se infecte con Candida.
Presentamos un caso de foliculitis candidiásica facial en un varón tras practicar sexo oral.
DESCRIPCION DEL CASO
Varón de 34 años de edad, sano, que consultó por una erupción pustulosa de 2 días de evolución localizada en la piel del labio superior. Las lesiones habían aparecido coincidiendo con la práctica de sexo oral con su mujer, la que gozaba de buena salud y no presentaba lesiones genitales, aunque no fue examinada.
La exploración inicial del paciente reveló pústulas foliculares superficiales en la zona del bigote. Se le indicó entonces cloxacilina oral y gentamicina tópica. En los días siguientes mostró un empeoramiento de su cuadro, consultando 5 días después con dolor e inflamación en la zona afectada, la que aparecía eritematosa, edematosa y con abundantes pústulas y costras (fig. 1). No presentaba fiebre y no se detectaron adenopatías. Tampoco presentaba lesiones orales y el resto del examen físico fue normal.
Fig. 1.--Eritema, edema y pústulas sobre el labio superior.
El examen microbiológico de las pústulas reveló Candida albicans abundante. Los exámenes de laboratorio, incluyendo hemograma, velocidad de sedimentación, glicemia y VIH fueron normales o negativos.
El paciente fue tratado con itraconazol oral 200 mg/ día durante 15 días junto acilopirox tópico, con lo que sus lesiones remitieron completamente.
DISCUSION
Candida albicans raramente produce foliculitis. Los factores predisponentes a su aparición incluyen seborrea, diabetes mellitus, malignidades, síndromes de inmunodeficiencia, tuberculosis, enfermedades virales, tratamientos inmunosupresores, tratamientos prolongados con antibióticos o corticosteroides locales o sistémicos, candidiasis oral o enteral y uso de rasuradoras infectadas3, 4. Exceptuando las infecciones septicémicas por Candida en heroinómanos5, la foliculitis candidiásica ha sido escasamente referida. La mayoría de los casos descritos incluyen individuos sanos sin factores predisponentes4. En un caso la erupción se asoció a un hipotiroidismo, en el que la menor producción de sebo pudo ocasionar una flora cutánea pobre en microorganismos lipofílicos y su sustitución por Candida albians6. En otros casos el trastorno se relacionó con alimentación endovenosa prolongada7 o apareció tras tratamientos con antibióticos sistémicos y/o corticosteroides tópicos8, 9 o tras depilación de las piernas mediante afeitado10. Clínicamente la erupción ha consistido principalmente en pápulas y pústulas foliculares sin evidencias de un estado septicémico previo. Ocasionalmente se ha descrito la presencia de inflamación marcada con pústulas y nódulos similares a los que el acné conglobata11 o lesiones que reme-daban a la Tinea barbae3.
Hasta donde sabemos, la foliculitis de la cara por Candida albicans no ha sido descrita en relación con cunilinguo. Si bien es cierto que es difícil o imposible demostrar fehacientemente el origen de la infección tras la práctica de sexo oral en nuestro caso, creemos que tal como el cunilinguo puede predisponer a infección vulvovaginal, también puede hacerlo en el varón a partir de candidas presentes en la flora vaginal normal.
Debería investigarse el antecedente de práctica de sexo oral en varones en los que no se detecten factores predisponentes para padecer de foliculitis candidiásica.