La incidencia del melanoma cutáneo invasivo ha aumentado de forma importante en las últimas décadas en la población caucásica, con un porcentaje de incremento anual del 3–7%1. Aunque España presenta una de las cifras de incidencia y mortalidad más bajas de Europa2,3, estudios recientes también señalan este aumento4. Sin embargo, no disponemos de datos epidemiológicos sobre la incidencia del melanoma in situ (MIS), aquel confinado a la epidermis, en nuestro país.
Con el objetivo de conocer la incidencia y tendencia del MIS se analizaron los datos proporcionados por el Registro de Cáncer de Girona, un registro de base poblacional que abarca la provincia de Girona y que cubre una población de 687.331 habitantes según el censo de 2006.
Se calcularon las tasas de incidencia brutas y ajustadas por edad a la población estándar mundial mediante el método directo. Para estimar el porcentaje de cambio anual (PCA) de la incidencia del MIS durante los 12 años del periodo de estudio (1994–2005) se utilizó el modelo de regresión Joinpoint5. Las diferencias del MIS según el sexo se examinaron con un t-test para la variable edad y una prueba de Chi cuadrado para las variables categóricas.
Entre 1994 y 2005, 688 pacientes residentes en la provincia de Girona fueron diagnosticados de melanoma cutáneo; en 550 el diagnóstico fue melanoma invasivo (79,94%), mientras en 138 el diagnóstico fue MIS (20,06%). Todos los casos analizados fueron confirmados histológicamente. De los 138 MIS, 84 (60,9%) fueron mujeres con una media de edad al diagnóstico de 62,96 años (rango: 22–92), mientras que 54 (39,1%) fueron hombres con una media de edad de 61,20 años (rango: 25–88), no existiendo diferencias estadísticamente significativas entre sexos. La localización anatómica más frecuente del MIS fue la cabeza y el cuello (42,8%) seguida del tronco (22,5%). La distribución por sexos no fue estadísticamente significativa (p=0,20). En cuanto a la histología de los MIS, aproximadamente el 60% de los casos correspondían al lentigo maligno con una media de edad al diagnóstico de 69,2 años, superior significativamente a la media de edad de los otros grupos histológicos (datos no mostrados) (tabla 1).
Características del melanoma in situ según el sexo. Girona, 1994–2005
Variable | Total | (%) | Hombres (n) | (%) | Mujeres (n) | (%) | Valor p |
Edad | |||||||
Media (años) | 62,28 | 61,20 | 62,96 | 0,524 | |||
Min-máx (años) | (22–92) | (25–88) | (22–92) | ||||
Grupos de edad | 0,215 | ||||||
15–44 | 22 | (15,9) | 7 | (13,0) | 15 | (17,9) | |
45–64 | 42 | (30,4) | 21 | (38,9) | 21 | (25,0) | |
⩾65 | 74 | (53,6) | 26 | (48,1) | 48 | (57,1) | |
Localización | 0,200 | ||||||
Cabeza y cuello | 59 | (42,8) | 26 | (48,1) | 33 | (39,3) | |
Tronco | 31 | (22,5) | 14 | (25,9) | 17 | (20,2) | |
Miembro superior | 7 | (5,1) | 3 | (5,6) | 4 | (4,8) | |
Miembro inferior | 16 | (11,6) | 2 | (3,7) | 14 | (16,7) | |
Otros y SAI | 25 | (18,1) | 9 | (16,7) | 16 | (19,0) | |
Histología | 0,459 | ||||||
MES | 4 | (2,9) | 1 | (1,9) | 3 | (3,6) | |
LM | 79 | (57,2) | 28 | (51,9) | 51 | (60,7) | |
MLA | 1 | (0,7) | 0 | (0,0) | 1 | (1,2) | |
Otros y SAI | 54 | (39,1) | 25 | (46,3) | 29 | (34,5) | |
Periodo diagnóstico | |||||||
1994–1999 | 44 | (31,88) | 18 | (33,3) | 26 | (30,9) | |
2000–2005 | 94 | (68,12) | 36 | (66,7) | 58 | (69,1) | |
Total | 138 | (100,0) | 54 | (39,1) | 84 | (60,9) |
LM: lentigo maligno; MLA: melanoma lentiginoso acral; MES: melanoma de extensión superficial; SAI: sine alter indicatio (sin otra indicación).
La tasa de incidencia del MIS se incrementó de 0,54 casos por 100.000 hombres-año en el periodo 1994–96 a 1,44 casos por 100.000 hombres-año en el periodo 2003–2005. En las mujeres se observó un incremento aún más pronunciado, pasando de 0,68 casos por 100.000 mujeres-año en el periodo 1994–96 a 2,23 casos por 100.000 mujeres-año en el periodo 2003–2005. Durante los 12 años del estudio y en nuestra área la incidencia del MIS se ha incrementado de una forma mucho más marcada que el melanoma invasivo4. El porcentaje de incremento anual para los hombres fue del 11,51% (IC 95%: 4,61–18,86), siendo para las mujeres del 11,43% (IC 95%: 2,04–21,69) (tabla 2).
Incidencia del melanoma in situ en Girona: tendencias durante el periodo 1994–2005
1994–1996 | 1997–1999 | 2000–2002 | 2003–2005 | |
In situ | ||||
Hombres | ||||
N | 6 | 12 | 13 | 23 |
TB | 0,78 | 1,53 | 1,57 | 2,43 |
TAm | 0,54 | 0,95 | 0,97 | 1,44 |
PCA1994–2005 | 11,51% (IC 95%: 4,61 a 18,86)¿ | |||
Mujeres | ||||
N | 9 | 17 | 22 | 36 |
TB | 1,15 | 2,13 | 2,62 | 3,85 |
TAm | 0,68 | 1,4 | 1,5 | 2,23 |
PCA1994–2005 | 11,43% (IC 95%: 2,04 a 21,69)¿ |
Los estudios epidemiológicos sobre la incidencia del MIS de base poblacional son escasos. Hasta la fecha se han publicado 4 estudios (Suecia 1968–19926, sur de Australia 1981–19927, EE.UU. 1975–19978 y Queensland [Australia] 1982–20029) constatándose en todos ellos un importante incremento de la incidencia del MIS, de alrededor del 10%, concordante con nuestros resultados (del 11%).
Es importante resaltar que en nuestra población los pacientes diagnosticados de MIS fueron unos tres años mayores que los sujetos con lesiones invasivas (datos no mostrados), resultados similares a los de la casuística americana con una diferencia de 4 años8. Este incremento en la edad de diagnóstico del MIS en nuestra población es debido a que el tipo histológico que predomina en las lesiones in situ es el lentigo maligno, melanoma que se da sobre todo en zonas fotoexpuestas (cabeza y cuello) en personas de edad avanzada10,11.
No cabe duda de que la población está mejor informada de los riesgos de la exposición solar. Esta conciencia social, junto con la campañas de detección precoz como el «Día del Euromelanoma», instaurada en el año 2000 por la Academia Europea de Dermatología12, el mejor acceso al sistema de salud y la más frecuente extirpación de lesiones pigmentadas sospechosas13, pueden haber contribuido al incremento de la incidencia del MIS.
Monitorizar la tendencias del melanoma según el estadiaje nos permitirá evaluar en un futuro la efectividad de las campañas de prevención del melanoma cutáneo en nuestro país; por esta razón sería necesario disponer de más información sobre las características diagnósticas del melanoma cutáneo por parte de los registros españoles de cáncer de base poblacional.