El metil glucosa dioleato (MGD) es un glicol de polietileno utilizado como emulsionante o surfactante que se considera no irritante ni sensibilizante en la piel sana.
Presentamos el caso de una niña de 12 años remitida a la consulta de dermatología por lesiones muy pruriginosas que habían comenzado en axilas, y en pocos días se habían extendido hacia los brazos, tronco, cuello y región facial. Los padres referían que le habían aplicado 3 días antes de la aparición de las lesiones una crema bálsamo de Mustela® para un eritema en las axilas que apareció tras aplicarse una crema depilatoria.
En la exploración se observaban placas eritemodescamativas en ambas axilas que afectaban a los pliegues y se extendían con menor intensidad a las localizaciones descritas (fig. 1).
Tras la aplicación de corticoides tópicos las lesiones desaparecieron en 10 días.
Se realizó un test de uso tanto con la crema depilatoria como con la crema bálsamo que había utilizado la paciente, aplicando estos productos 2 veces al día en la misma localización en su antebrazo. Solo se observó reacción con la crema bálsamo a los 3 días de su aplicación.
Se realizaron pruebas epicutáneas que incluyeron la batería estándar recomendada por el Grupo Español de Investigación en Dermatitis de Contacto y Alergia Cutánea (GEIDAC), batería de cosméticos de Chemotectique® y la crema bálsamo tal cual, que solo demostraron positividad a las 96h a la crema bálsamo. Tras suministrarnos el laboratorio los ingredientes de dicha crema, se completó el estudio observándose solo positividad al MDG al 5% en vaselina a las 48h (+) y 96h (++) y a la crema bálsamo tal cual a las 96h (++) (fig. 2). Se realizaron 10 controles con el MGD que fueron negativos.
El MGD es una molécula de alto peso molecular que se considera impenetrable en la piel sana. Se obtiene del diester de la glucosa metilo y el ácido oleico. Se utiliza como emulsionante y surfactante no iónico en tratamientos tópicos y cosméticos para el cuidado de la piel y del cabello1,2.
Según los estudios de seguridad se considera un producto no irritante ni sensibilizante en la piel sana, pero se han publicado casos aislados de dermatitis alérgica de contacto relacionados con MGD: 2 casos con repelentes de insectos1,2, un caso en relación con un champú3, un caso tras la aplicación de un antifúngico tópico4, 2 casos con antibióticos tópicos usados en pacientes con úlceras en piernas5,6 y, por último, más recientemente un caso de un bálsamo utilizado durante la lactancia7. Dado el amplio uso de MGD en cosméticos estos casos son anecdóticos, aunque relevantes para considerarlo con capacidad sensibilizante en algunas ocasiones.
En nuestro caso, el eczema alérgico de contacto se relacionó con la aplicación de una crema bálsamo, que habitualmente se utiliza para prevenir irritaciones en el área del pañal y que se utilizó en las axilas de una niña, que refería una irritación previa tras una depilación. Se aplicó el producto sobre una piel con una posible dermatitis irritativa de contacto, que probablemente facilitó la dermatitis alérgica de contacto observada, permitiendo una mayor penetración de las sustancias contenidas en la crema bálsamo.
En resumen, presentamos un nuevo caso de dermatitis alérgica de contacto por MGD, en una localización no previamente descrita como las axilas, en una niña con una piel irritada.
Destacamos con este caso que, aunque se considera el MGD un producto seguro en piel sana no debería recomendarse su aplicación cuando la piel está dañada. Los casos publicados son aislados, por lo que consideramos que se necesitarían más estudios en piel inflamada con MGD a diferentes concentraciones para valorar su capacidad de sensibilización.
Por último, resaltar la realización del test de uso de los productos aportados por el paciente, para llegar al diagnóstico de alérgenos no habituales, que no disponemos en nuestras baterías de estudio de rutina.
Conflicto de interesesLos autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.