Hemos leído con interés el artículo titulado «Metástasis cutáneas a distancia de cáncer de próstata: 2 casos»1. Se tratan de 2 casos estudiados inmunohistoquímicamente de forma muy exhaustiva, y cuyo diagnóstico no deja lugar a ninguna duda. Estos casos nos llevan a recordar la utilidad del avian erythroblastosis E26 virus oncogene homolog (ERG) en el diagnóstico cutáneo de las metástasis de carcinoma de próstata.
El ERG es un factor de transcripción de la familia de los genes ETS. Se expresa en las células endoteliales de vasos sanguíneos y linfáticos, tanto normales como neoplásicos, resultando un marcador altamente específico para el endotelio vascular, siendo de gran utilidad en el diagnóstico de angiosarcomas, hemangioendoteliomas y sarcomas de Kaposi. Sin embargo, también resulta positivo en: 1) las células epiteliales neoplásicas del 50% de los carcinomas de próstata, tanto primarios como metastásicos (fig. 1), aunque no se exprese en el tejido prostático normal; 2) en las células mieloides inmaduras de médula ósea; 3) en las células de leucemia mieloide crónica, y 4) en las células de sarcoma de Ewing2. Su positividad en el carcinoma de próstata, en contraste con su negatividad, prácticamente en la totalidad del resto de los carcinomas, confiere a este marcador una gran utilidad en la batería inmunohistoquímica de identificación de metástasis cutáneas de origen desconocido3.