Una mujer de 37 años sin antecedentes personales o familiares de interés consulta por 3 pápulas de color violáceo localizadas en pabellón auricular izquierdo, surcadas por telangiectasias y de consistencia dura (fig. 1). La paciente refería que estas lesiones eran sangrantes aun después de haber tomado una pauta de antibióticos orales. Se decide realizar una biopsia cutánea que es informada como hiperplasia angiolinfoide con eosinofilia. Ante este diagnóstico y por el carácter localizado de las lesiones se decidió aplicar 2 ciclos de crioterapia. La paciente acudió a la última revisión con un descenso marcado del tamaño de las mismas.
La hiperplasia angiolinfoide con eosinofilia es un proceso angiolinfoproliferativo benigno. Se caracteriza por la proliferación endotelial e infiltrado linfoide acompañante en dermis e hipodermis. Cursa con pápulas y nódulos de aspecto angiomatoso y de consistencia blanda e irregular teniendo que realizar el diagnóstico diferencial con entidades como la enfermedad de Kimura, el granuloma piógeno, angiomas, seudolinfomas, el granuloma facial o el angiosarcoma. El síntoma más frecuente es el prurito y su localización más frecuente es periauricular como en el presente caso.