Patients diagnosed with primary cutaneous melanoma have a greater lifetime risk of developing further melanomas. Most of these melanomas appear to arise de novo, but a proportion of them develop in pre-existing melanocytic nevi.
ObjectiveTo determine risk factors associated with the development of a second cutaneous melanoma arising on a nevus in patients diagnosed with cutaneous melanoma.
Patients and methodsA series of 981 patients diagnosed with cutaneous melanoma was selected; 47 of them had been diagnosed with a second melanoma. These 47 patients were classified into 2 groups according to whether or not there was histological evidence that the melanoma was associated with a nevus.
ResultsAge at diagnosis less than 40 years, tumor location on the trunk, and superficial spreading subtype were independent risk factors for the appearance of a primary melanoma on a nevus. The only factor associated with the appearance of a second nevusassociated melanoma was that the first melanoma was also associated with a nevus (odds ratio, 9.51; 95% confidence interval 1.6–56.56; P=.042).
ConclusionsNevus-associated melanomas develop mainly in young patients, on the trunk, and are of the superficial spreading subtype. A history of primary cutaneous melanoma arising on a nevus is associated with a 9-fold increase in the risk of developing a second nevus-associated melanoma. These findings highlight the need for careful follow-up of all melanocytic lesions in patients who have had a primary nevus-associated melanoma.
Los pacientes diagnosticados de un melanoma cutáneo tienen más riesgo que el resto de la población de padecer nuevos melanomas a lo largo de su vida. La mayoría de estos melanomas aparecen «de novo», pero existe un porcentaje de ellos que se desarrolla sobre nevos melanocíticos previos.
ObjetivoDeterminar los factores de riesgo asociados al desarrollo de un segundo melanoma cutáneo sobre nevo en pacientes diagnosticados de melanoma cutáneo.
MétodosSe seleccionaron los datos de 981 pacientes diagnosticados de un primer melanoma cutáneo, 47 de los cuales habían sido diagnosticados de un segundo melanoma. Todos los pacientes fueron clasificados en función de si el melanoma presentó o no asociación histológica a un nevo.
ResultadosLa edad inferior a 40 años, la localización en el tronco y el subtipo histológico de extensión superficial fueron los factores de riesgo independientes asociados al desarrollo de un primer melanoma sobre nevo. El único factor asociado al desarrollo de un segundo melanoma sobre nevo fue que el primer melanoma también se hubiera presentado asociado a un nevo (OR: 9,51, 95% de intervalo de confianza: 1,6–56,56; p = 0,042).
ConclusionesLos melanomas se desarrollan asociados a un nevo principalmente en pacientes jóvenes, en el tronco y del subtipo tipo de extensión superficial. A su vez, el desarrollo de un primer melanoma sobre nevo aumenta el riesgo hasta 9 veces de desarrollar un segundo melanoma sobre un nevo previo. Estos hallazgos subrayan la importancia del seguimiento estrecho de todas las lesiones melánicas en los pacientes que han desarrollado un primer melanoma sobre nevo.