Niña de 7 años sin antecedentes de interés, que presentaba una lesión congénita, pigmentada y asintomática en cara posterior del muslo izquierdo. Desde hacía 4 meses la lesión era pruriginosa, con enrojecimiento y descamación central, así como con aclaramiento periférico.
En la exploración dermatológica destacaba una lesión marronácea, ovalada, de 1cm de tamaño, con una superficie eritematodescamativa y un halo hipopigmentado periférico de 4mm (fig. 1).
El fenómeno de Meyerson hace referencia a la eccematización de una lesión cutánea previa, habitualmente melanocítica. Es un fenómeno benigno, generalmente asintomático, infrecuente en la edad pediátrica. Por su parte, el halo nevus o nevus de Sutton es un nevus melanocítico benigno y generalmente adquirido, caracterizado por un halo periférico acrómico, frecuente en la edad pediátrica.
Se ha descrito tanto la coexistencia del fenómeno de Meyerson y del halo nevus en lesiones diferentes de un mismo paciente como la progresión de un nevus de Meyerson hacia un halo nevus, y viceversa. Sin embargo, la presencia simultánea de ambos fenómenos en un mismo nevus no ha sido referida hasta la fecha. Presentamos, por tanto, un ejemplo de una lesión melanocítica en la que coexisten los fenómenos de Sutton y Meyerson (fenómeno SU-ME).