La inmunoterapia se ha convertido en una terapia importante para el manejo del cáncer de piel avanzado. La monoterapia con fármacos anti-PD-1 (muerte celular programada de proteína 1) constituye actualmente la terapia de primera línea para el carcinoma cutáneo de células escamosas avanzado (cSCC) en pacientes no candidates a cirugía curativa y/o radioterapia. Cemiplimab ha mostrado una tasa de respuesta objetiva del 47,5%, con una duración de la respuesta de más de 6 meses en el 57% de los pacientes respondedores1. Los inhibidores de puntos de control inmunitarios (ICI) modifican el microentorno inmunológico del tumor, originando, no solo respuestas antitumorales, sino también efectos adversos inmunomediados (irAEs)2,3. Se han comunicado irAEs reumáticos en cerca del 10% de los pacientes que reciben ICI, no existiendo actualmente guías establecidas para su manejo terapéutico, exceptuando las recomendaciones que incluyen la evitación de dosis >10mg/día de prednisona o equivalente4,5.
Presentamos tres casos de cSCC avanzado que recibieron terapia anti-PD-1 que presentaron artralgia y/o mialgia y fueron tratados con éxito con hidroxicloroquina.
Caso #1: Mujer de 83 años con cSCC en la mejilla derecha y metástasis ganglionar no extirpable refractaria a radioterapia que recibió 2mg/kg de pembrolizumab cada 3 semanas. La paciente logró respuesta clínica y radiológica completa tras 6 ciclos, manteniéndose dicha respuesta tras 17 ciclos. Sin embargo, al recibir la dosis #3, presentó artromialgias grado 2. Las pruebas de laboratorio revelaron un nivel de proteína C reactiva (PCR) de 33,5U/l (0–5mg/l), tasa de sedimentación eritrocítica (ESR) de 21mm/h (1–20mm/h), y niveles de creatina cinasa (CK) de 41U/l (29–168U/l). Al iniciarse los síntomas, se le prescribieron 10mg/día de prednisona y 200mg/12h de hidroxicloroquina oral, con desaparición completa de los síntomas transcurridas 3 semanas (tabla 1). Posteriormente se utilizó un tratamiento de mantenimiento de 5mg/día de prednisona y 200mg/12h de hidroxicloroquina.
Características demográficas, tipos de cáncer, inmunoterapia y episodios adversos reumáticos relacionados con el sistema inmunológico (irAEs)
Edad | Tumor | Diferenciación | Infiltrado inmune | IHQ – PDL1 | Tratamiento | Respuesta | iRAEs | Semanas hasta iRAEs | Nivel de CK | Tratamiento inicial para iRAEs | Tratamiento de mantenimiento para iRAEs | Mejoría | |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|---|
Caso #1 | 83 | cSCC – ganglio metastásico | Moderadamente diferenciado | Moderado | 30% | Pembrolizumab 2mg/kg/3 semanas | RC | Artralgia y mialgia | 6 | Normal | HCQ 200mg/12hPrednisona 10mg/día 4 semanas | HCQ 200mg/12hPrednisona 5mg/día | Significativa |
Caso #2 | 82 | cSCC no extirpable | Moderadamente diferenciado | Moderado | 40% | Pembrolizumab 2mg/kg/3 semanas | RC | Artralgia y mialgia | 6 | Normal | HCQ 200mg/díaPrednisona 10mg/día 3 semanas | HCQ 200mg/díaPrednisona 5mg/día | Significativa |
Caso #3 | 80 | cSCC no extirpable | Bien diferenciado | Bajo | <1% | Cemiplimab 350mg/3 semanas | RC | Artralgia | 3 | Normal | HCQ 200mg/día | HCQ 200mg/día | Significativa |
M: mujer; V: varón; RC: respuesta completa; IHQ: inmunohistoquímica; CK: creatina cinasa; HCQ: hidroxicloroquina.
Caso #2: Un varón de 82 años con cSCC recidivado que afectaba al canto interno derecho, no candidato a cirugía ni radioterapia. Se trató con 2mg/kg de pembrolizumab cada 3 semanas. Presentó respuesta clínica y radiológica en el ciclo #5, manteniéndose tras 11 ciclos. Sin embargo, en el ciclo #3, desarrolló artromialgias de grado 2. Los resultados de las pruebas de laboratorio reflejaron un nivel de CFP de 60,5mg/l (de 0 a 5mg/l), una ESR de 32mm/h (1–20mm/h) y niveles de CK dentro del rango normal. Los síntomas se resolvieron con pauta inicial de 10mg/día de prednisona y 200mg/día de hidroxicloroquina oral (tabla 1), tras el cual se estableció el tratamiento en 5mg/día de prednisona y 200mg/día de hidroxicloroquina como terapia de mantenimiento.
Caso #3: Varón de 80 años con cSCC recidivado localmente avanzado en su muñeca derecha, refractario a radioterapia recibió tratamiento con cemiplimab cada 3 semanas, logrando la respuesta clínica completa sostenida tras discontinuación del tratamiento. Durante el ciclo, presentó artralgias de grado 2. Los resultados de la analítica revelaron niveles de PCR de 9,5mg/l (0–5mg/l), ESR de 46mm/h (de 1 a 20mm/h) y niveles de CK normales. Fue tratado con éxitocon 200mg de hidroxicloroquina dos veces al día (tabla 1).
En los tres casos, el factor reumatoide y los anticuerpos cíclicos del péptido citrulinado resultaron negativos.
Con estos tres casos nuestro objetivo es destacar la efectividad de hidroxicloroquina en el manejo de los efectos secundarios musculoesqueléticos o irAEs reumáticos. Para nuestro conocimiento, se trata del primer estudio que refleja la mejoría clínica completa de artromialgias inducidas por inmunoterapia utilizando hidroxicloroquina.
La hidroxicloroquina se utiliza en el manejo de diversas enfermedades reumatológicas, inmunológicas e infecciosas. Además de sus efectos antiinflamatorios, inmunomoduladores, antiinfecciosos, antitrombóticos y metabólicos bien conocidos6 posee también propiedades antiproliferativas y antimutagénicas potentes7. Además, se considera un tratamiento seguro con pocos efectos adversos. La retinopatía, aunque preocupante, es rara cuando se administra a dosis <5mg/kg/día7, siendo potencialmente reversible.
Se calcula que la prevalencia actual de los irAE reumatológicos es del 10%, pero existen estudios limitados estimen su prevalencia, probablemente a causa de su naturaleza relativamente leve, careciendo a veces de sospecha clínica4,8. Los irAE reumatológicos más comunes incluyen artralgias, mialgias, artritis y síndrome similar a la polimialgia reumática5. Algunos estudios indican que la prevalencia de las artralgias oscila del 1 al 43% frente al 1 al 7% de artritis5. Dichos efectos secundarios están comúnmente asociados a fármacos anti-PD-1 o ICI combinada9. La prevalencia estimada de artralgias con pembrolizumab se estima del 9 al 12%, pero muchos casos pasan inadvertidos. Las artralgias afectan normalmente a las articulaciones, de manera simétrica9, y tienden a producirse alrededor del 3° al 6° mes, tras el inicio de la inmunoterapia. Los marcadores serológicos como el factor reumatoide, los niveles de anticuerpos del péptido citrulinado o de CK no están generalmente elevados9.
El manejo de los irAE puede conseguirse a menudo sin suspender la inmunoterapia, pero requiere mantener la dosificación de prednisona <10mg/día (o equivalente) para evitar comprometer su eficacia4. Algunos irAE pueden persistir, a pesar de la suspensión del tratamiento. A pesar de que la Cancer Immunotherapy Society recomienda el uso de fármacos antirreumáticos modificadores de la enfermedad, la hidroxicloroquina no se menciona como ahorrador de corticosteroides6.
En conclusión, la hidroxicloroquina parece ser una opción segura y efectiva para abordar los síntomas musculoesqueléticos, sin comprometer la eficacia de la inmunoterapia utilizándose en monoterapia o como adyuvante. Son necesarios más estudios que validen su papel en el manejo de dichos pacientes.
Conflicto de interesesLos autores declaran la ausencia de conflicto de intereses.
El autor principal tuvo pleno acceso a todos los datos del estudio y asume la responsabilidad plena de su integridad y precisión del análisis de los mismos. Los infrascritos declararon la ausencia de conflicto de intereses, actividades financieras o cualquier otra relación o actividad que los lectores pudieran percibir que podrían influir en el estudio, o que pudieran dar la impresión de haber influido en el contenido del trabajo presentado. El estudio no ha recibido financiación de ningún tipo.