Una nueva edición del libro de texto Dermatologie und Venereology, de Otto Braun-Falco, acaba de aparecer publicada, lo que representa la tercera edición en alemán y la segunda en inglés de este libro de texto, que, en un periodo de tiempo relativamente corto desde su primera edición en 1969, se ha convertido ya en un clásico entre los cuatro o cinco libros de texto más famosos de nuestra especialidad. En esta nueva edición figuran como editores y principales autores los doctores Walter H.C. Burgdorf, Gerd Plewig, Helmut H. Wolf y Michael Landthaler. El primero en esta lista de editores, Walter H.C. Burgdorf, es un autor muy prolífico y bien conocido en la literatura dermatológica mundial, que ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en distintas universidades de Estados Unidos y que ahora, con su jubilación, ha regresado a su país de origen, Alemania, donde continúa ejerciendo una notable actividad docente e investigadora como consultor del Departamento de Dermatología de la Ludwig-Maximilians-Universitat de Munich. El segundo de los autores, el Prof. Gerd Plewig, es discípulo directo del Prof. Braun-Falco y su sucesor al frente del Departamento de Dermatología de la Ludwig-Maximilians-Universitat de Munich, y los otros dos autores principales, los Drs. Helmut H. Wolf y Michael Landthaler, pueden considerarse también directa o indirectamente discípulos del autor original de este libro, el Prof. Otto Braun-Falco, lo que confiere a esta nueva edición uniformidad y continuidad con las ediciones anteriores.

En primer lugar, este libro de texto de Dermatología tiene una ventaja importante sobre sus más importantes competidores (los conocidos coloquialmente como «Fitzpatrick», «Rook» y «Bolognia»), y es que está editado en un solo volumen, lo que elimina la frecuente frustración de que casi siempre lo que el lector busca está en el otro tomo. Se trata de un volumen que, en un formato manejable y con un numero razonable de páginas para un solo tomo (1.712), contiene toda la información importante respecto a la etiología, las manifestaciones clínicas, la patogenia, la histopatología, el curso, el tratamiento y el pronóstico de prácticamente todas las enfermedades cutáneas conocidas hasta la fecha. Cuando el lector sólo busca una consulta rápida sobre la mejor opción terapéutica para una determinada entidad dermatológica lo encuentra rápidamente, ya que el apartado de tratamiento aparece resaltado y separado del resto del texto, al final de cada capítulo, y dentro de un cuadrado de fondo amarillo que facilita su hallazgo. Sin embargo, todo el texto del libro está escrito de manera concisa, elegante y amena, y ese lector que muchas veces sólo busca un dato concreto, con frecuencia se sorprenderá inmerso leyendo el capítulo completo de la entidad en cuestión. Una aportación curiosa y yo creo que única de este libro, ya que rara vez se encuentra en otros libros de texto, la constituye el hecho de que bajo el título de cada entidad dermatológica figura el autor y el año de la descripción original.

El libro aparece dividido en 16 secciones (1. Principios básicos, 2. Herramientas diagnósticas, 3. Enfermedades infecciosas, 4. Reacciones de intolerancia, 5. Enfermeda des inflamatorias, 6. Enfermedades ambientales, 7. Enfermedades ampollosas, 8. Enfermedades de tejido conectivo, 9. Otras enfermedades hereditarias, 10. Enfermedades vasculares, 11. Enfermedades pigmentarias, 12. Enfermedades de las estructuras anexiales, 13. Enfermedades especiales y regionales, 14. Enfermedades metabólicas, 15. Tumores y 16. Terapia). Aunque este sistema de clasificación presenta como principal inconveniente el que se utilizan criterios diferentes para cada sección (en unos casos criterios morfológicos, como en las enfermedades ampollosas o pigmentarias, en otros etiológicos, como en las enfermedades infecciosas o ambientales, en otros atendiendo al órgano o tejido afectado, como en las enfermedades del tejido conectivo, y en otros, criterios de localización, como en las enfermedades regionales), probablemente no existe otro sistema mejor de clasificación que permita abordar en su conjunto la totalidad de los procesos dermatológicos. Sin embargo, sí sorprende la disparidad de que dentro de una determinada sección, como son las enfermedades inflamatorias, los distintos procesos se agrupen en algunos casos por la morfología clínica de sus lesiones, incluyendo enfermedades pápulo-escamosas, enfermedades papulosas y liquenoides, enfermedades pustulosas, etc., y al final, dentro de esta misma sección, aparezcan dos capítulos en los que el criterio fundamental de su clasificación es histopatológico: enfermedades granulomatosas y enfermedades con eosinofilia. Esta mezcla de criterios de clasificación dentro de una misma sección es más difícil de justificar. Pero en cualquier caso, la mayoría de las veces el lector encontrará lo que busca como libro de consulta, bien en la tabla de contenido inicial, bien recurriendo al índice de materias por orden alfabético del final del libro.

Otra de las principales virtudes de este libro es la calidad de sus figuras. Es clásica en los libros de texto de medicina alemanes la enorme calidad de sus imágenes, pero en los tratados dermatológicos suele ser aún mejor. Esta nueva edición del Dermatologie und Venereology de Otto Braun-Falco no es una excepción, y la mayoría de las entidades dermatológicas aparece ilustrada con soberbias figuras que ilustran en color las características clínicas típicas de las distintas dermatosis y neoplasias cutáneas, lo que hace que este tratado sea en realidad un libro de texto y un atlas en un solo volumen. Personalmente echo de menos alguna ilustración histopatológica, al menos de las entidades más comunes, pero comprendo que añadir figuras histopatológicas habría incrementado notablemente el número del páginas de libro y probablemente imposibilitaría su edición en un solo volumen.

Otro aspecto a destacar de este tratado es la bibliografía al final de cada capítulo; el lector notará inmediatamente que el autor o los autores de cada uno de ellos han hecho un esfuerzo especial en seleccionar y enumerar, por orden alfabético del primer autor de cada trabajo, los artículos más recientes sobre el tema en cuestión. Y en algunos capítulos, dentro de la bibliografía se conserva también un apartado denominado «Artículos clásicos», donde se enumeran los trabajos más importantes sobre el tema, aunque ya sean antiguos. Este sistema tiene importantes ventajas para un lector interesado en revisar la bibliografía sobre un tema concreto, porque identifica y separa fácilmente los artículos que han contribuido históricamente a la individualización de un proceso como entidad concreta desde su descripción original, de aquellos otros trabajos que describen los últimos avances en el conocimiento de las manifestaciones clínicas, la patogenia o el tratamiento de esa entidad.

Al final del libro existe un amplio capítulo de «Terapéutica», donde se revisa todo el arsenal terapéutico actualmente disponible en nuestra especialidad, con numerosos esquemas muy didácticos y con abundantes ejemplos ilustrativos de casos reales.

Un índice de materias muy completo y por orden alfabético al final del libro permitirá al lector encontrar rápidamente las páginas en las que consultar las características clínicas de un proceso dermatológico concreto, un síndrome específico, una determinada terapéutica o las distintas páginas donde puede encontrar referencias a una lesión dermatológica, un signo cutáneo, un factor etiológico, una entidad o un síndrome con nombre propio.

En resumen, la nueva edición de Dermatologie und Venereology de Otto Braun-Falco actualiza y mejora las ediciones anteriores; su publicación en inglés aumentará notablemente la difusión de este estupendo libro de texto dermatológico, ya que entre las nuevas generaciones de dermatólogos de todo el mundo disminuye el número de lectores en alemán y aumentan constantemente los potenciales lectores en inglés. En mi opinión, esta nueva edición, por su carácter didáctico con numerosas tablas, esquemas y figuras, por su actualidad incluyendo las últimas aportaciones a nuestro conocimiento de cada entidad concreta, y por la sobresaliente calidad de sus imágenes, ocupará un lugar prominente en la biblioteca de la mayoría de los dermatólogos del mundo, y será frecuentemente utilizado como libro de consulta, tanto por residentes en periodo de formación como por dermatólogos ya formados que deseen conocer las aportaciones más recientes de cada enfermedad dermatológica.