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amistosa&#44; cordial o colegial&#44; o &#171;usted&#187;&#44; si no conocemos personalmente al destinatario o mantenemos con &#233;l una relaci&#243;n respetuosa&#44; oficial&#44; cort&#233;s o distante&#40;distante en el tiempo &#91;por la diferencia de edad&#93;&#44; en la categor&#237;a profesional o en el contacto&#41;&#46; En los &#250;ltimos tiempos hemos asistido en Espa&#241;a a una tendencia muy marcada en favor del tuteo para la correspondencia personal&#44; pero el &#171;usted&#187; sigue us&#225;ndose a&#250;n en buena parte de la correspondencia de car&#225;cter profesional u oficial&#46;</p><p class="elsevierStylePara">2&#46;En cuanto a los recursos apelativos&#44; en el registro de confianza&#44; tuteo&#44; lo habitual es dirigirse a la otra persona por su nombre de pila a secas o&#44; en los casos de confianza m&#225;s estrecha&#44; incluso por un diminutivo o un apodo cari&#241;oso&#58; &#171;Te remito&#44; Pilar&#44; un paciente que acudi&#243; a mi consultorio por psoriasis de tres meses de evoluci&#243;n&#187;&#59; &#171;Querido pap&#225;&#187;&#59; &#171;Me muero de ganas de volver a casa y darte un beso&#44; pituf&#237;n&#187;&#46; En el registro oficial o respetuoso&#44; en cambio&#44; lo habitual es utilizar los apellidos&#44; precedidos o no del nombre del pila&#46;</p><p class="elsevierStylePara">3&#46; En cuanto a los t&#237;tulos de cortes&#237;a&#44; en el registro de confianza no se usan tratamientos especiales&#44; pero en el registro cort&#233;s es habitual en el encabezamiento anteponer al nombre los t&#237;tulos de cortes&#237;a pertinentes&#46; Es cierto que en Espa&#241;a se aprecia &#250;ltimamente una tendencia clara hacia la simplificaci&#243;n de esta costumbre&#44; pero que no ha conseguido hacer desaparecer de las cartas por completo los t&#237;tulos de cortes&#237;a&#46; &#201;stos pueden ir desde los sencillos &#171;Sr&#46;&#187; o &#171;Sra&#46;&#187; si se utilizan s&#243;lo los apellidos y &#171;Sr&#46; D&#46;&#187; o &#171;D&#46;&#187; &#40;&#171;Sra&#46; D&#46;<span class="elsevierStyleSup">a</span>&#187; o &#171;D&#46;<span class="elsevierStyleSup">a</span>&#187;&#41; si se utiliza el nombre completo&#44; hasta las complejas f&#243;rmulas de tratamiento asignadas por la tradici&#243;n para determinados cargos y dignidades&#58; &#171;Dr&#46; D&#46;&#187; en el caso de un m&#233;dico&#44; &#171;Prof&#46; D&#46;&#187; en el caso de un catedr&#225;tico&#44; &#171;Excmo&#46; Sr&#46; Rector Magn&#237;fico D&#46;&#187; en el caso de un rector de universidad&#44; &#171;Ilmo&#46; Sr&#46; D&#46;&#187; en el caso de un decano de facultad&#44; &#171;Ilmo&#46; y Rvdmo&#46; Sr&#46; D&#46;&#187; en el caso de un obispo&#44; &#171;S&#46; A&#46; R&#46; D&#46;&#187; en el caso de un infante de Espa&#241;a&#44; etc&#233;tera&#46;</p><p class="elsevierStylePara"> Publicaciones cient&#237;ficas</p><p class="elsevierStylePara">1&#46; En las publicaciones cient&#237;ficas&#44; a diferencia de lo comentado para el g&#233;nero epistolar&#44; la segunda persona brilla por su ausencia&#46; En su af&#225;n por lograr la mayor objetividad posible en el discurso&#44; las publicaciones cient&#237;ficas est&#225;n redactadas casi en su totalidad de forma impersonal &#40;&#171;se&#187;&#41;&#44; en tercera persona &#40;para referirse a lo que otros han dicho o han hecho&#41; o en primera persona &#40;para exponer opiniones o realizaciones propias&#41;&#46; Como ya he comentado en otra ocasi&#243;n<span class="elsevierStyleSup">1</span>&#44; la obsesi&#243;n por la objetividad en los textos cient&#237;ficos lleva a muchos autores a sustituir incluso la primera persona por frases impersonales o pasivas&#46; Escriben&#44; por ejemplo&#44; &#171;A 50 pacientes les fueron determinadas las concentraciones plasm&#225;ticas de digoxina&#187; en lugar de &#171;Determinamos las concentraciones plasm&#225;ticas de digoxina en 50 pacientes&#187;&#44; o &#171;A partir de estos resultados se considera que el nuevo medicamento es eficaz&#187; en lugar de &#171;A partir de estos resultados consideramos que el nuevo medicamento es eficaz&#187;&#46; Obs&#233;rvese que en este &#250;ltimo caso&#44; por ejemplo&#44; existen diferencias notables entre &#171;se considera eficaz&#187; y &#171;lo consideramos eficaz&#187;&#46; Contrariamente a lo que muchos creen&#44; la voz pasiva no es m&#225;s cient&#237;fica ni m&#225;s objetiva&#59; tan s&#243;lo es m&#225;s imprecisa&#46;</p><p class="elsevierStylePara">2&#46;Para referirse a otra persona&#44; en las publicaciones cient&#237;ficas se utiliza el apellido &#40;o&#44; entre quienes hablamos espa&#241;ol&#44; los apellidos&#41; o el nombre completo&#44; pero nunca el nombre de pila solo&#46;</p><p class="elsevierStylePara">3&#46;Y en cuanto a los t&#237;tulos de cortes&#237;a&#44; que todav&#237;a se ve&#237;an con cierta frecuencia en las publicaciones de principios del siglo XX&#44; han desaparecido pr&#225;cticamente por completo de los textos cient&#237;ficos actuales&#44; tambi&#233;n en aras de una mayor objetividad del lenguaje&#46; As&#237;&#44; hoy lo habitual es referirse a Barnaard&#44; Pasteur&#44; Prusiner o Pir&#250;lez sin mencionar su calidad ilustre&#44; reverend&#237;sima&#44; profesoral o doctoral&#46;</p><p class="elsevierStylePara"> Errores frecuentes por confusi&#243;n entre ambos modelos</p><p class="elsevierStylePara">En los textos cient&#237;ficos pueden hallarse con relativa frecuencia rasgos propios del g&#233;nero epistolar &#40;o de los debates orales en reuniones y congresos&#41; que introducen en el discurso cient&#237;fico un elemento clar&#237;simo de subjetividad y discriminaci&#243;n&#46; Los m&#225;s frecuentes&#44; a mi modo de ver&#44; son los tres siguientes&#58;</p><p class="elsevierStylePara">El uso de &#171;doctor&#187; para distinguir a los m&#233;dicos&#46; Entre los m&#233;dicos son frecuentes las frases como &#233;sta&#58; &#171;Ortega&#44; Unamuno y el doctor Mara&#241;&#243;n se cuentan entre las figuras se&#241;eras de la cultura espa&#241;ola en la primera mitad del siglo XX&#187;&#46; Olvidan quienes as&#237; escriben que el doctorado es un grado universitario&#44; el superior&#44; que se concede en todas las facultades&#44; y no s&#243;lo en la de medicina y cirug&#237;a&#46; Si tan doctores fueron Ortega y Unamuno como Mara&#241;&#243;n&#44; &#191;por qu&#233; consignar s&#243;lo el t&#237;tulo de este &#250;ltimo&#63; M&#225;s llamativo resulta a&#250;n este proceder cuando uno escribe &#171;Dr&#46; P&#233;rez G&#243;mez&#187; para referirse a un residente de dermatolog&#237;a que no es m&#225;s que licenciado&#44; y utiliza acto seguido el apellido sin m&#225;s para referirse a un gran pensador contempor&#225;neo que est&#225; en posesi&#243;n de varios doctorados universitarios&#46;</p><p class="elsevierStylePara">A menudo&#44; un paso m&#225;s adelante en la senda de la subjetividad&#44; los autores utilizan el recurso al t&#237;tulo de &#171;doctor&#187; para indicar su amistad con la persona citada&#44; como en los ejemplos siguientes&#44; que&#44; como todos los que estoy dando en esta respuesta&#44; no son reales&#44; pero muy bien podr&#237;an serlo&#58; &#171;Tras los trabajos de Schmidt&#44; Whirsyff y el grupo de McLein&#44; los 47 casos publicados por el doctor Iglesias vienen a demostrar que esta dermatosis es tambi&#233;n frecuente en nuestro medio&#187;&#59; &#171;A ra&#237;z de la visita de dos disc&#237;pulos de Addison al servicio del doctor Jim&#233;nez D&#237;az&#44;&#46;&#46;&#46;&#187;&#46;</p><p class="elsevierStylePara"><span class="elsevierStyleItalic"> El uso de &#171;don&#187; para distinguir al maestro&#46;</span> En relaci&#243;n con el &#250;ltimo ejemplo citado&#44; el de Jim&#233;nez D&#237;az&#44; es tambi&#233;n muy frecuente entre los m&#233;dicos espa&#241;oles el recurso al nombre de pila precedido de &#171;don&#187; para expresar una relaci&#243;n de disc&#237;pulo y maestro con alguna de las figuras cimeras de la medicina espa&#241;ola reciente&#46; &#191;Qui&#233;n no ha le&#237;do alguna vez frases como &#171;Las aportaciones de Golgi&#44; K&#246;lliker&#44; Waldeyer y&#44; muy especialmente&#44; la escuela neurohistol&#243;gica espa&#241;ola de don Santiago&#187; o &#171;La hip&#243;tesis hormonal de don Gregorio difer&#237;a sustancialmente de la propuesta por Smithson en Canad&#225;&#187;&#63; No dudo que este tipo de pro-ceder pueda estar justificado en los textos literarios e incluso en el g&#233;nero ensay&#237;stico&#44; pero resulta impro-pio del estilo cient&#237;fico&#46; Y espero que no se me interprete mal&#58; me parece estupendo&#44; desde luego&#44; que los autores de un art&#237;culo hayan disfrutado en su paso por las aulas de profesores excepcionales y guarden para con sus maestros el agradecimiento debido&#44; pero ello no parece motivo suficiente para llamar &#171;don Santiago&#187; a Ram&#243;n y Cajal o &#171;don Gregorio&#187; a Mara&#241;&#243;n&#44; sobre todo si acto seguido no llamamos &#171;don Ciril&#187; a Rozman&#44; &#171;don Camillo&#187; a Golgi&#44; &#171;don Iv&#225;n&#187; a P&#225;vlov&#44; &#171;don Sigmund&#187; a Freud o &#171;don Michishige&#187; a Takayasu&#46;</p><p class="elsevierStylePara"><span class="elsevierStyleItalic"> La discriminaci&#243;n de las mujeres&#46;</span> Como hasta &#233;pocas relativamente recientes era muy reducido el n&#250;mero de mujeres que ocupaban puestos destacados en el mundo de la medicina&#44; la ciencia&#44; las artes o la pol&#237;tica&#44; durante mucho tiempo fue costumbre usar el apellido solo para referirse a los hombres&#44; pero usarlo precedido del nombre de pila o un tratamiento de cortes&#237;a para referirse a las mujeres&#46; As&#237;&#44; era costumbre hablar de Pasteur&#44; Koch o Barraquer&#44; pero llamar &#171;Marie Curie&#187; o &#171;Madame Curie&#187; a la famosa qu&#237;mica francopolaca&#44; galardonada en dos ocasiones con el premio Nobel&#59; si uno utilizaba el apellido solo&#44; &#171;Curie&#187; &#40;o &#171;Dr&#46; Curie&#187;&#41;&#44; la mayor&#237;a de los lectores pensaban que se hac&#237;a referencia a su esposo&#44; Pierre Curie&#44; tambi&#233;n cient&#237;fico afamado y nobelado&#46; Id&#233;ntica diferencia de trato se advierte entre Carusso y Mar&#237;a Callas &#40;o &#171;la Callas&#187;&#41;&#44; Gandhi e Indira Gandhi&#44; Churchill y Margaret Thatcher&#44; Aznar y Celia Villalobos&#44; etc&#46; Ninguno de estos procederes est&#225;n justificados en la actualidad&#46; Podemos hablar de &#171;P&#233;rez&#44; G&#243;mez y Mu&#241;iz&#187;&#44; &#171;Juan P&#233;rez&#44; Julia G&#243;mez y Sisebuto Mu&#241;iz&#187; o &#171;el doctor P&#233;rez&#44; la profesora G&#243;mez y el profesor Mu&#241;iz&#187;&#44; pero no de &#171;P&#233;rez&#44; Julia G&#243;mez y Mu&#241;iz&#187; ni &#171;P&#233;rez&#44; la profesora G&#243;mez y Sisebuto Mu&#241;iz&#187; &#40;&#161;y no digamos ya &#171;P&#233;rez&#44; la G&#243;mez y Mu&#241;iz&#187;&#33;&#41;&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Mi respuesta a la pregunta&#44; &#161;por fin&#33;</p><p class="elsevierStylePara">Tras este pre&#225;mbulo lleno de disquisiciones sobre las diferencias de estilo entre el g&#233;nero epistolar y la redacci&#243;n cient&#237;fica&#44; estamos ya todos --los lectores y yo--&#44; creo&#44; en condiciones de responder a la cuesti&#243;n de hoy&#46; Si las contestaciones que he venido publicando en este consultorio desde el a&#241;o 2000 han podido parecer en ocasiones extra&#241;as o poco corteses&#44; ello se debe a las peculiares caracter&#237;sticas de esta secci&#243;n&#44; no comparable a ninguna otra secci&#243;n de la revista&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Por las propias caracter&#237;sticas del consultorio&#44; todas las preguntas recibidas hasta ahora --a excepci&#243;n de la siguiente&#44; enviada a la redacci&#243;n de Actas Dermo-Sifiliogr&#225;ficas como carta al director-- est&#225;n redactadas en forma de carta personal y&#44; por tanto&#44; en segunda persona&#58; quienes me conoc&#237;an ya previamente se dirigen a m&#237; como &#171;t&#250;&#187; o &#171;Fernando&#187;&#59; quienes no me conoc&#237;an previamente&#44; como &#171;usted&#187;&#44; &#171;Sr&#46; Navarro&#187; &#40;si ignoraban mi condici&#243;n de m&#233;dico&#41; o &#171;Dr&#46; Navarro&#187; &#40;si me sab&#237;an ya m&#233;dico especialista&#41;&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Para mis respuestas podr&#237;a muy bien haber optado tambi&#233;n por utilizar el formato de una carta personal&#46; Pens&#233;&#44; no obstante&#44; que los argumentos empleados y los datos aportados podr&#237;an ser de utilidad para todos los dermat&#243;logos&#44; y no s&#243;lo para el remitente de la consulta&#44; de modo que decid&#237; optar por el estilo cient&#237;fico impersonal&#44; en el que no cabe para referirse a quien envi&#243; la consulta otra forma que la utilizada habitualmente para referirme a Rook&#44; S&#225;nchez Yus&#44; Dorland o Requena&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Esa sensaci&#243;n extra&#241;a o poco cort&#233;s que ha advertido Barber&#225; Montesinos es resultado directo del contraste evidente entre el texto de las preguntas escritas en registro cort&#233;s --que se reproducen siempre textualmente---&#44; con todos sus &#171;usted&#187; y sus &#171;doctor Navarro&#187;&#44; y la respuesta impersonal redactada en estilo cient&#237;fico objetivo&#44; con todas las referencias personales en tercera persona y sin t&#237;tulos de cortes&#237;a&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Lo que m&#225;s me agrada de esta consulta venida de Tortosa es que me ofrece la oportunidad de explicar claramente que en ning&#250;n momento fue mi intenci&#243;n faltar al respeto a los consultantes&#46; Y es bueno que esto quede bien claro porque pretendo seguir usando en adelante este mismo formato --preguntas reproducidas textualmente en segunda persona y respuestas impersonales de acuerdo con el estilo general de las publicaciones cient&#237;ficas--&#44; por dos motivos&#46;</p><p class="elsevierStylePara">En primer lugar&#44; porque sigo convencido de que los asuntos que debatimos y comentamos en esta secci&#243;n --&#191;anag&#233;n o an&#225;geno&#63;&#44; &#191;Koebner o K&#246;bner&#63;&#44; &#191;lentigo o l&#233;ntigo&#63;&#44; &#191;candidiasis o candidosis&#63;&#44; &#191;t&#233;rminos latinos o castellanizados&#63;-- son de inter&#233;s general para todos los dermat&#243;logos y no s&#243;lo para quien env&#237;a la pregunta&#46; Tengo la impresi&#243;n de que una respuesta escrita en segunda persona puede hacer que los dem&#225;s lectores lleguen --de modo consciente o inconsciente-- a la conclusi&#243;n de que la cosa no va con ellos&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Y en segundo lugar&#44; sobre todo&#44; porque creo que las respuestas en segunda persona pueden resultar descorteses&#44; por agravio comparativo&#44; en una publicaci&#243;n cient&#237;fica&#46; Tomando a modo de ejemplo las dos consultas de hoy&#44; en nuestra relaci&#243;n epistolar privada estoy encantado de poder encabezar una carta a Barber&#225; Montesinos con &#171;Querida Edelmira&#187; y otra a Garc&#237;a P&#233;rez con &#171;Estimado don Antonio&#187; o &#171;Estimado Prof&#46; Garc&#237;a P&#233;rez&#187; &#40;la discrepancia obedece&#44; adem&#225;s de a la diferencia de edad&#44; al hecho bien sabido de que el aire que se respira en nuestras universidades&#44; y m&#225;s a&#250;n en una ciudad como Salamanca&#44; es mucho m&#225;s rancio y acartonado que el de nuestros hospitales y centros de salud&#41;&#46; Pero en un consultorio que se publica en una revista especializada me cuidar&#233; muy mucho de escribir jam&#225;s &#171;el profesor Garc&#237;a P&#233;rez tiene raz&#243;n cuando afirma&#187; dos l&#237;neas despu&#233;s de &#171;estoy de acuerdo con Edelmira en este aspecto&#187;&#44; igual que jam&#225;s escribir&#237;a en una revista especializada &#171;Simmonds&#44; Dufour y mi t&#237;o Paco opinan que los melanomas malignos deben extirparse con un margen de 2 cm&#187;&#46;</p>"
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Fernando A Navarro
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amistosa&#44; cordial o colegial&#44; o &#171;usted&#187;&#44; si no conocemos personalmente al destinatario o mantenemos con &#233;l una relaci&#243;n respetuosa&#44; oficial&#44; cort&#233;s o distante&#40;distante en el tiempo &#91;por la diferencia de edad&#93;&#44; en la categor&#237;a profesional o en el contacto&#41;&#46; En los &#250;ltimos tiempos hemos asistido en Espa&#241;a a una tendencia muy marcada en favor del tuteo para la correspondencia personal&#44; pero el &#171;usted&#187; sigue us&#225;ndose a&#250;n en buena parte de la correspondencia de car&#225;cter profesional u oficial&#46;</p><p class="elsevierStylePara">2&#46;En cuanto a los recursos apelativos&#44; en el registro de confianza&#44; tuteo&#44; lo habitual es dirigirse a la otra persona por su nombre de pila a secas o&#44; en los casos de confianza m&#225;s estrecha&#44; incluso por un diminutivo o un apodo cari&#241;oso&#58; &#171;Te remito&#44; Pilar&#44; un paciente que acudi&#243; a mi consultorio por psoriasis de tres meses de evoluci&#243;n&#187;&#59; &#171;Querido pap&#225;&#187;&#59; &#171;Me muero de ganas de volver a casa y darte un beso&#44; pituf&#237;n&#187;&#46; En el registro oficial o respetuoso&#44; en cambio&#44; lo habitual es utilizar los apellidos&#44; precedidos o no del nombre del pila&#46;</p><p class="elsevierStylePara">3&#46; En cuanto a los t&#237;tulos de cortes&#237;a&#44; en el registro de confianza no se usan tratamientos especiales&#44; pero en el registro cort&#233;s es habitual en el encabezamiento anteponer al nombre los t&#237;tulos de cortes&#237;a pertinentes&#46; Es cierto que en Espa&#241;a se aprecia &#250;ltimamente una tendencia clara hacia la simplificaci&#243;n de esta costumbre&#44; pero que no ha conseguido hacer desaparecer de las cartas por completo los t&#237;tulos de cortes&#237;a&#46; &#201;stos pueden ir desde los sencillos &#171;Sr&#46;&#187; o &#171;Sra&#46;&#187; si se utilizan s&#243;lo los apellidos y &#171;Sr&#46; D&#46;&#187; o &#171;D&#46;&#187; &#40;&#171;Sra&#46; D&#46;<span class="elsevierStyleSup">a</span>&#187; 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las publicaciones cient&#237;ficas est&#225;n redactadas casi en su totalidad de forma impersonal &#40;&#171;se&#187;&#41;&#44; en tercera persona &#40;para referirse a lo que otros han dicho o han hecho&#41; o en primera persona &#40;para exponer opiniones o realizaciones propias&#41;&#46; Como ya he comentado en otra ocasi&#243;n<span class="elsevierStyleSup">1</span>&#44; la obsesi&#243;n por la objetividad en los textos cient&#237;ficos lleva a muchos autores a sustituir incluso la primera persona por frases impersonales o pasivas&#46; Escriben&#44; por ejemplo&#44; &#171;A 50 pacientes les fueron determinadas las concentraciones plasm&#225;ticas de digoxina&#187; en lugar de &#171;Determinamos las concentraciones plasm&#225;ticas de digoxina en 50 pacientes&#187;&#44; o &#171;A partir de estos resultados se considera que el nuevo medicamento es eficaz&#187; en lugar de &#171;A partir de estos resultados consideramos que el nuevo medicamento es eficaz&#187;&#46; Obs&#233;rvese que en este &#250;ltimo caso&#44; por ejemplo&#44; existen diferencias notables entre &#171;se considera eficaz&#187; y &#171;lo consideramos eficaz&#187;&#46; Contrariamente a lo que muchos creen&#44; la voz pasiva no es m&#225;s cient&#237;fica ni m&#225;s objetiva&#59; tan s&#243;lo es m&#225;s imprecisa&#46;</p><p class="elsevierStylePara">2&#46;Para referirse a otra persona&#44; en las publicaciones cient&#237;ficas se utiliza el apellido &#40;o&#44; entre quienes hablamos espa&#241;ol&#44; los apellidos&#41; o el nombre completo&#44; pero nunca el nombre de pila solo&#46;</p><p class="elsevierStylePara">3&#46;Y en cuanto a los t&#237;tulos de cortes&#237;a&#44; que todav&#237;a se ve&#237;an con cierta frecuencia en las publicaciones de principios del siglo XX&#44; han desaparecido pr&#225;cticamente por completo de los textos cient&#237;ficos actuales&#44; tambi&#233;n en aras de una mayor objetividad del lenguaje&#46; As&#237;&#44; hoy lo habitual es referirse a Barnaard&#44; Pasteur&#44; Prusiner o Pir&#250;lez sin mencionar su calidad ilustre&#44; reverend&#237;sima&#44; profesoral o doctoral&#46;</p><p class="elsevierStylePara"> Errores frecuentes por confusi&#243;n entre ambos modelos</p><p class="elsevierStylePara">En los textos cient&#237;ficos pueden hallarse con relativa frecuencia rasgos propios del g&#233;nero epistolar &#40;o de los debates orales en reuniones y congresos&#41; que introducen en el discurso cient&#237;fico un elemento clar&#237;simo de subjetividad y discriminaci&#243;n&#46; Los m&#225;s frecuentes&#44; a mi modo de ver&#44; son los tres siguientes&#58;</p><p class="elsevierStylePara">El uso de &#171;doctor&#187; para distinguir a los m&#233;dicos&#46; Entre los m&#233;dicos son frecuentes las frases como &#233;sta&#58; &#171;Ortega&#44; Unamuno y el doctor Mara&#241;&#243;n se cuentan entre las figuras se&#241;eras de la cultura espa&#241;ola en la primera mitad del siglo XX&#187;&#46; Olvidan quienes as&#237; escriben que el doctorado es un grado universitario&#44; el superior&#44; que se concede en todas las facultades&#44; y no s&#243;lo en la de medicina y cirug&#237;a&#46; Si tan doctores fueron Ortega y Unamuno como Mara&#241;&#243;n&#44; &#191;por qu&#233; consignar s&#243;lo el t&#237;tulo de este &#250;ltimo&#63; M&#225;s llamativo resulta a&#250;n este proceder cuando uno escribe &#171;Dr&#46; P&#233;rez G&#243;mez&#187; para referirse a un residente de dermatolog&#237;a que no es m&#225;s que licenciado&#44; y utiliza acto seguido el apellido sin m&#225;s para referirse a un gran pensador contempor&#225;neo que est&#225; en posesi&#243;n de varios doctorados universitarios&#46;</p><p class="elsevierStylePara">A menudo&#44; un paso m&#225;s adelante en la senda de la subjetividad&#44; los autores utilizan el recurso al t&#237;tulo de &#171;doctor&#187; para indicar su amistad con la persona citada&#44; como en los ejemplos siguientes&#44; que&#44; como todos los que estoy dando en esta respuesta&#44; no son reales&#44; pero muy bien podr&#237;an serlo&#58; &#171;Tras los trabajos de Schmidt&#44; Whirsyff y el grupo de McLein&#44; los 47 casos publicados por el doctor Iglesias vienen a demostrar que esta dermatosis es tambi&#233;n frecuente en nuestro medio&#187;&#59; &#171;A ra&#237;z de la visita de dos disc&#237;pulos de Addison al servicio del doctor Jim&#233;nez D&#237;az&#44;&#46;&#46;&#46;&#187;&#46;</p><p class="elsevierStylePara"><span class="elsevierStyleItalic"> El uso de &#171;don&#187; para distinguir al maestro&#46;</span> En relaci&#243;n con el &#250;ltimo ejemplo citado&#44; el de Jim&#233;nez D&#237;az&#44; es tambi&#233;n muy frecuente entre los m&#233;dicos espa&#241;oles el recurso al nombre de pila precedido de &#171;don&#187; para expresar una relaci&#243;n de disc&#237;pulo y maestro con alguna de las figuras cimeras de la medicina espa&#241;ola reciente&#46; &#191;Qui&#233;n no ha le&#237;do alguna vez frases como &#171;Las aportaciones de Golgi&#44; K&#246;lliker&#44; Waldeyer y&#44; muy especialmente&#44; la escuela neurohistol&#243;gica espa&#241;ola de don Santiago&#187; o &#171;La hip&#243;tesis hormonal de don Gregorio difer&#237;a sustancialmente de la propuesta por Smithson en Canad&#225;&#187;&#63; No dudo que este tipo de pro-ceder pueda estar justificado en los textos literarios e incluso en el g&#233;nero ensay&#237;stico&#44; pero resulta impro-pio del estilo cient&#237;fico&#46; Y espero que no se me interprete mal&#58; me parece estupendo&#44; desde luego&#44; que los autores de un art&#237;culo hayan disfrutado en su paso por las aulas de profesores excepcionales y guarden para con sus maestros el agradecimiento debido&#44; pero ello no parece motivo suficiente para llamar &#171;don Santiago&#187; a Ram&#243;n y Cajal o &#171;don Gregorio&#187; a Mara&#241;&#243;n&#44; sobre todo si acto seguido no llamamos &#171;don Ciril&#187; a Rozman&#44; &#171;don Camillo&#187; a Golgi&#44; &#171;don Iv&#225;n&#187; a P&#225;vlov&#44; &#171;don Sigmund&#187; a Freud o &#171;don Michishige&#187; a Takayasu&#46;</p><p class="elsevierStylePara"><span class="elsevierStyleItalic"> La discriminaci&#243;n de las mujeres&#46;</span> Como hasta &#233;pocas relativamente recientes era muy reducido el n&#250;mero de mujeres que ocupaban puestos destacados en el mundo de la medicina&#44; la ciencia&#44; las artes o la pol&#237;tica&#44; durante mucho tiempo fue costumbre usar el apellido solo para referirse a los hombres&#44; pero usarlo precedido del nombre de pila o un tratamiento de cortes&#237;a para referirse a las mujeres&#46; As&#237;&#44; era costumbre hablar de Pasteur&#44; Koch o Barraquer&#44; pero llamar &#171;Marie Curie&#187; o &#171;Madame Curie&#187; a la famosa qu&#237;mica francopolaca&#44; galardonada en dos ocasiones con el premio Nobel&#59; si uno utilizaba el apellido solo&#44; &#171;Curie&#187; &#40;o &#171;Dr&#46; Curie&#187;&#41;&#44; la mayor&#237;a de los lectores pensaban que se hac&#237;a referencia a su esposo&#44; Pierre Curie&#44; tambi&#233;n cient&#237;fico afamado y nobelado&#46; Id&#233;ntica diferencia de trato se advierte entre Carusso y Mar&#237;a Callas &#40;o &#171;la Callas&#187;&#41;&#44; Gandhi e Indira Gandhi&#44; Churchill y Margaret Thatcher&#44; Aznar y Celia Villalobos&#44; etc&#46; Ninguno de estos procederes est&#225;n justificados en la actualidad&#46; Podemos hablar de &#171;P&#233;rez&#44; G&#243;mez y Mu&#241;iz&#187;&#44; &#171;Juan P&#233;rez&#44; Julia G&#243;mez y Sisebuto Mu&#241;iz&#187; o &#171;el doctor P&#233;rez&#44; la profesora G&#243;mez y el profesor Mu&#241;iz&#187;&#44; pero no de &#171;P&#233;rez&#44; Julia G&#243;mez y Mu&#241;iz&#187; ni &#171;P&#233;rez&#44; la profesora G&#243;mez y Sisebuto Mu&#241;iz&#187; &#40;&#161;y no digamos ya &#171;P&#233;rez&#44; la G&#243;mez y Mu&#241;iz&#187;&#33;&#41;&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Mi respuesta a la pregunta&#44; &#161;por fin&#33;</p><p class="elsevierStylePara">Tras este pre&#225;mbulo lleno de disquisiciones sobre las diferencias de estilo entre el g&#233;nero epistolar y la redacci&#243;n cient&#237;fica&#44; estamos ya todos --los lectores y yo--&#44; creo&#44; en condiciones de responder a la cuesti&#243;n de hoy&#46; Si las contestaciones que he venido publicando en este consultorio desde el a&#241;o 2000 han podido parecer en ocasiones extra&#241;as o poco corteses&#44; ello se debe a las peculiares caracter&#237;sticas de esta secci&#243;n&#44; no comparable a ninguna otra secci&#243;n de la revista&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Por las propias caracter&#237;sticas del consultorio&#44; todas las preguntas recibidas hasta ahora --a excepci&#243;n de la siguiente&#44; enviada a la redacci&#243;n de Actas Dermo-Sifiliogr&#225;ficas como carta al director-- est&#225;n redactadas en forma de carta personal y&#44; por tanto&#44; en segunda persona&#58; quienes me conoc&#237;an ya previamente se dirigen a m&#237; como &#171;t&#250;&#187; o &#171;Fernando&#187;&#59; quienes no me conoc&#237;an previamente&#44; como &#171;usted&#187;&#44; &#171;Sr&#46; Navarro&#187; &#40;si ignoraban mi condici&#243;n de m&#233;dico&#41; o &#171;Dr&#46; Navarro&#187; &#40;si me sab&#237;an ya m&#233;dico especialista&#41;&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Para mis respuestas podr&#237;a muy bien haber optado tambi&#233;n por utilizar el formato de una carta personal&#46; Pens&#233;&#44; no obstante&#44; que los argumentos empleados y los datos aportados podr&#237;an ser de utilidad para todos los dermat&#243;logos&#44; y no s&#243;lo para el remitente de la consulta&#44; de modo que decid&#237; optar por el estilo cient&#237;fico impersonal&#44; en el que no cabe para referirse a quien envi&#243; la consulta otra forma que la utilizada habitualmente para referirme a Rook&#44; S&#225;nchez Yus&#44; Dorland o Requena&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Esa sensaci&#243;n extra&#241;a o poco cort&#233;s que ha advertido Barber&#225; Montesinos es resultado directo del contraste evidente entre el texto de las preguntas escritas en registro cort&#233;s --que se reproducen siempre textualmente---&#44; con todos sus &#171;usted&#187; y sus &#171;doctor Navarro&#187;&#44; y la respuesta impersonal redactada en estilo cient&#237;fico objetivo&#44; con todas las referencias personales en tercera persona y sin t&#237;tulos de cortes&#237;a&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Lo que m&#225;s me agrada de esta consulta venida de Tortosa es que me ofrece la oportunidad de explicar claramente que en ning&#250;n momento fue mi intenci&#243;n faltar al respeto a los consultantes&#46; Y es bueno que esto quede bien claro porque pretendo seguir usando en adelante este mismo formato --preguntas reproducidas textualmente en segunda persona y respuestas impersonales de acuerdo con el estilo general de las publicaciones cient&#237;ficas--&#44; por dos motivos&#46;</p><p class="elsevierStylePara">En primer lugar&#44; porque sigo convencido de que los asuntos que debatimos y comentamos en esta secci&#243;n --&#191;anag&#233;n o an&#225;geno&#63;&#44; &#191;Koebner o K&#246;bner&#63;&#44; &#191;lentigo o l&#233;ntigo&#63;&#44; &#191;candidiasis o candidosis&#63;&#44; &#191;t&#233;rminos latinos o castellanizados&#63;-- son de inter&#233;s general para todos los dermat&#243;logos y no s&#243;lo para quien env&#237;a la pregunta&#46; Tengo la impresi&#243;n de que una respuesta escrita en segunda persona puede hacer que los dem&#225;s lectores lleguen --de modo consciente o inconsciente-- a la conclusi&#243;n de que la cosa no va con ellos&#46;</p><p class="elsevierStylePara">Y en segundo lugar&#44; sobre todo&#44; porque creo que las respuestas en segunda persona pueden resultar descorteses&#44; por agravio comparativo&#44; en una publicaci&#243;n cient&#237;fica&#46; Tomando a modo de ejemplo las dos consultas de hoy&#44; en nuestra relaci&#243;n epistolar privada estoy encantado de poder encabezar una carta a Barber&#225; Montesinos con &#171;Querida Edelmira&#187; y otra a Garc&#237;a P&#233;rez con &#171;Estimado don Antonio&#187; o &#171;Estimado Prof&#46; Garc&#237;a P&#233;rez&#187; &#40;la discrepancia obedece&#44; adem&#225;s de a la diferencia de edad&#44; al hecho bien sabido de que el aire que se respira en nuestras universidades&#44; y m&#225;s a&#250;n en una ciudad como Salamanca&#44; es mucho m&#225;s rancio y acartonado que el de nuestros hospitales y centros de salud&#41;&#46; Pero en un consultorio que se publica en una revista especializada me cuidar&#233; muy mucho de escribir jam&#225;s &#171;el profesor Garc&#237;a P&#233;rez tiene raz&#243;n cuando afirma&#187; dos l&#237;neas despu&#233;s de &#171;estoy de acuerdo con Edelmira en este aspecto&#187;&#44; igual que jam&#225;s escribir&#237;a en una revista especializada &#171;Simmonds&#44; Dufour y mi t&#237;o Paco opinan que los melanomas malignos deben extirparse con un margen de 2 cm&#187;&#46;</p>"
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Información del artículo
ISSN: 00017310
Idioma original: Español
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2024 Noviembre 1 4 5
2024 Octubre 33 38 71
2024 Septiembre 32 30 62
2024 Agosto 51 59 110
2024 Julio 32 22 54
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2024 Mayo 30 27 57
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2020 Julio 31 5 36
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