En las últimas décadas, la ecografía cutánea ha adquirido un protagonismo creciente en el ámbito de la dermatología. Hasta el momento son múltiples sus aplicaciones, tanto en patología inflamatoria como en patología tumoral. De hecho, el melanoma es uno de los tumores que más se ha beneficiado de sus avances tecnológicos, tanto para el diagnóstico inicial como para el seguimiento. Tal es así que hoy en día la ecografía cutánea se ha posicionado como herramienta diagnóstica no invasiva, cuyas principales aplicaciones en el campo del melanoma son determinar el espesor tumoral y analizar la vascularización intratumoral, con objeto de conocer factores pronósticos a tiempo real, así como ayudar al diagnóstico de metástasis subcutáneas y ganglionares durante la estadificación inicial y durante el seguimiento con objeto de disminuir la morbimortalidad.
In the last few decades, the role of cutaneous ultrasound has increased in dermatology. This technique currently has multiple applications, both in inflammatory and tumoural disease. Indeed, melanoma is one of the tumours benefitting most from technological advances in ultrasound, both for initial diagnosis and for follow-up. Today, cutaneous ultrasound is a noninvasive diagnostic technique, whose main applications in melanoma are to determine tumoural thickness and analyse intratumoural vascularisation. This allows prognostic factors to be determined in real time and contributes to the diagnosis of subcutaneous and nodal metastases during initial staging and follow-up with a view to reducing morbidity and mortality.