Many scientists have reported on the current trend toward global warming and decreased precipitation. The magnitude and cause of these changes and their impact on human activity are matters of debate. Higher temperatures could increase the prevalence of some skin diseases. More people would suffer from sensitive skin and dry skin due to the reduction of relative humidity. An impaired skin barrier function would increase the severity and prevalence of atopic dermatitis. The greater percentage of UV-B radiation reaching the earth's surface, combined with the increased popularity of sunbathing, may lead to greater rates of skin cancer and photoaging if effective sunscreens are not used. Furthermore, the habitats of various vectors of infectious disease are changing. Such changes, should they occur, will be a challenge for dermatologists who will face the important task of prevention and early diagnosis and treatment of these diseases.
Numerosos científicos informan de una tendencia actual al calentamiento global y a la disminución de las precipitaciones. Su cuantía, sus causas y la influencia de la actividad humana son motivo de controversia. Un aumento de la temperatura podría incrementar la prevalencia de algunas patologías cutáneas; más personas padecerían piel sensible y una mayor xerosis cutánea por disminución de la humedad relativa. Las alteraciones de la función de la barrera cutánea aumentarían la gravedad y prevalencia de la dermatitis atópica. La mayor proporción de radiación UVB que alcanza la superficie terrestre, unida a hábitos poblacionales de aumento de fotoexposición, junto con una fotoprotección incorrecta, hacen esperables mayores tasas de cáncer cutáneo y de fotoenvejecimiento. Además, los hábitats de diversos vectores de patologías infecciosas están cambiando. Afrontar estos problemas, en caso de que se produjesen, será un reto para el dermatólogo, que tendrá una importante labor de prevención, diagnóstico y tratamiento precoz de estas patologías.